
VIVIENDO GREDOS
Viviendo los alrededores de la Sierra de Gredos
desde Arenas de San Pedro
Desde Arenas de San Pedro podemos disfrutar de paisajes maravillosos, ríos de agua transparente y rutas de paseo sin igual. Tenemos un clima mediterráneo, con Invierno suave y Verano caluroso, pero con una Primavera de una luminosidad especial, donde se puede contemplar ese renacer a la vida de sus árboles, plantas, flores con su colorido y esplendor, diferentes aves y otros animales. Y el cielo más brillante y espectacular que hayas visto nunca, con la remarcada imagen de las crestas y montañas del macizo de Gredos. ¿Qué podemos decir del Otoño que nos regala el magnífico colorido de las hojas de sus castaños y chopos, momento en que la fotografía es tan rica y diversa que no sabes hacia dónde apuntar el objetivo de tu cámara?





Arenas de San Pedro y sus alrededores, está llena de canchales de granito, debido a las formaciones y transformaciones de la Sierra de Gredos, enclavada en el Macizo Central de la Península Ibérica.

Por su orografía, las gargantas, ríos y arroyos, le dan agua para sus bosques, agricultura y ganadería, además de producir hermosos charcos y piscinas naturales para el disfrute de sus habitantes y los turistas que nos visitan.

La ganadería de la zona, principalmente vacuno de carne, tanto estabulada como en pasto libre, que aún realiza la trashumancia a su tiempo buscando los pastos de la sierra, tiene una calidad reconocida y una amplia producción.


En esta zona es muy importante la agricultura en pequeñas explotaciones familiares, lo más sobresaliente son los cerezos, las higueras, los castaños y los olivos.
Los cerezos, plantados en terrenos de todo tipo, sobre todo en bancales, son preciosos de ver en la época de floración. Las pequeñas explotaciones se agrupan en cooperativa para comercializar sus producciones.
Las higueras repartidas en todos los pueblos, particularmente en Poyales del Hoyo, dónde sus propietarios también se agrupan para vender los higos, tanto frescos como secos.
En todos los pueblos de la falda de Gredos, el castaño es un árbol característico, produciendo
no solo cantidad, sino calidad en sus castañas.
El olivo está muy arraigado en todo el Valle del Tiétar desde hace mucho tiempo, dando una producción de aceite, no solamente grande en cantidad. Las almazaras, de la zona consiguen un aceite de oliva Virgen Extra muy demandado,incluso premiado en certámenes importantes.

La floración de los cerezos es una de las maravillas para disfrutar todas las primaveras.

Hay distintas calidades y calibres para seleccionar las cerezas.

Es apreciable la preparación de las higueras, para que su recolección sea cómoda manualmente.

Los higos recogidos manualmente con delicadeza, son seleccionados por calidad, tamaño y maduración.

La selección y preparación de los higos secos dicen mucho de su calidad.

El castaño es un gran árbol, en porte y tamaño. Su fruto es muy apreciado, así como su madera.

Preciosas y muy alimenticias pero hay que tener cuidado al recolectarlas ya que la cápsula donde se encuentran se defiende.

Los olivos, árboles milenarios de troncos con personalidad, producen oro líquido, llamado aceite.

Las aceitunas son el fruto del olivo, de un fuerte sabor amargo al recogerlas dan un líquido precioso al ser prensadas, el aceite.
Esta magnífica tierra que disfrutamos, además nos ofrece manjares regalados que solo tenemos que buscar y recoger. como las zarzamoras, los madroños y en su tiempo setas exquisitas como el níscalo, el boletus, la amanita caesarea, la mízcala, los parasoles y otras.
Las zarzamoras se encuentran en los zarzales que crecen en los caminos, en las lindes de los terrenos y en lugares escarpados y dan un fruto negro parduzco de sabor riquísimo, además de poder hacer una exquisita mermelada con él.
Hay muchos madroños en los alrededores, son arboles de pequeño tamaño cuyo fruto, de color rojo intenso cuando está maduro, es muy sabroso aunque poco apreciado.
Pero lo mejor de todo es el tiempo en que disfrutando del campo puedes encontrar setas que tu paladar agradecerá, como níscalos, amanitas caesareas y otros, ya indicados.

Las moras de las zarzas o zarzamoras, son un manjar gratuito para el paladar, bien al natural o en mermelada.

Especie micorrizógena de árboles frondosos. Frecuente bajo encinas, alcornoques, castaños y robles. Excelente comestible fácil de reconocer

Otro regalo de esta zona, muy apreciado y exquisito de sabor es el Níscalo.

El boletus es uno de los premios a la constancia en la búsqueda de setas. De sabor delicioso y delicado.

Encontrarte con una pieza como esta es un tesoro, con sabor a piñon y olor resinoso, es de muy buen comestible.

Los madroños, otro fruto de sabor exquisito en su maduración pero poco apreciado.